Sus brazos expulsan fuego que puede quemar una ciudad entera. Su comida preferida es el carbón, pues le permite expulsar más fuego por ambos brazos.
Su preevolución Magmar tiene aspecto de iguana por lo que se supone que Magmortar también. No posee muchos enemigos naturales. Su cuerpo, que puede llegar a alcanzar los 2000 grados, está totalmente cubierto de llamas y vive en lo más profundo de los cráteres volcánicos. Cuando alcanza su temperatura máxima obtiene una tonalidad blanquecina por el calor, al igual que pasa con los metales a altas temperaturas. Aunque no lo aparenta, es muy ágil.
La mayoría de los Pokémon de tipo fuego cuando usan ataques de tipo fuego como lanzallamas expulsan el fuego por la boca u hocico. Sin embargo, Magmortar lo lanza por los cañones que están al final de sus brazos.
Vive en cercanías a volcanes y lugares muy calientes porque puede soportar grandes temperaturas. Es capaz de curarse sumergiéndose en la lava, al igual que hace su preevolución Magmar. En su hábitat natural no posee ningún depredador conocido, ya que ninguno es capaz de soportar las altísimas temperaturas de la zona donde vive, excepto algún que otro Pokémon tipo fuego. Su cola es capaz de evaporar una piscina entera.
Tiene mal carácter, pero si lo cría un entrenador desde pequeño se convertirá en uno de los Pokémon más fuertes de su equipo.
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